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Las puertas y ventanas de aluminio han ganado popularidad en las últimas dos décadas. Durante mucho tiempo la gente ha tenido la percepción de que el aluminio sólo estaba disponible en un color, el plateado, siendo utilizado más en edificios comerciales que en propiedades residenciales.
Ahora, con los nuevos desarrollos en la fabricación, manufactura y revestimientos, las puertas y ventanas de aluminio han avanzado a pasos agigantados en los últimos años. Ahora el aluminio es más delgado, más eficiente térmicamente y viene en una cantidad casi ilimitada de colores.
Como leerás en la siguiente comparación entre: Aluminio, PVC y madera para puertas y ventanas, el aluminio tiene una gran cantidad de ventajas sobre los otros dos materiales en cuanto a fuerza, resistencia y colores.
¿Cuáles son las principales ventajas del aluminio sobre el PVC y la madera?
Perfil y resistencia
El aluminio es el más fuerte de estos materiales y por ello los productos de aluminio, como las puertas o ventanas correderas, pueden fabricarse con un perfil de marco más ligero y delgado, lo que permite que en grandes extensiones de vidrio entre más luz en la propiedad.
La resistencia del aluminio como material para los marcos garantiza que éstos sigan siendo resistentes a la flexión, la torsión, la expansión y la contracción con el cambio de temperatura. Otro beneficio de la resistencia del metal, es que puede ser usado para fabricar puertas bifurcadas para postes de esquina o para miradores, lo que la madera o el PVC, simplemente no serían lo suficientemente resistentes para este cometido.
La resistencia de la madera puede variar dramáticamente, ya que cada puerta o ventana está compuesta de un número de diferentes piezas de madera que están pegadas con poliuretano. La madera de ingeniería es mucho más resistente pero, a pesar de esto, incluso la madera de ingeniería puede ser propensa a deformarse si los marcos absorben demasiada humedad o están expuestos a luz solar durante mucho tiempo, lo que conduce a problemas de fugas en las juntas con la eficiencia térmica.
Las puertas de PVC ofrecen una resistencia similar a la de la madera y, al igual que las puertas de dicho material, el PVC se puede curvar cuando se expone a condiciones climáticas extremas. Cuando se utilizan grandes marcos de PVC, como en el caso de las puertas plegables, las variaciones de calor pueden hacer que el material se expanda y contraiga, lo que puede dificultar en la apertura, el plegado y el cierre de las puertas.
Resistencia a los elementos y mayor longevidad
El aluminio tiene una alta resistencia a los elementos exteriores, con acabados de color de larga duración e incluso acabados de efecto madera. Estos pueden durar 20-30 años teniendo el aspecto del primer día y sin las molestias del mantenimiento. El PVC tiende a decolorarse y tiene una vida útil de alrededor de 15-20 años, aunque después de 4-5 años puede empezar a parecer algo desgastado. Con su resistencia añadida, el aluminio tiene muchas menos probabilidades de deformarse o pudrirse como resultado, y tampoco es probable que se abolle fácilmente debido a su alta relación resistencia-peso.
Mantenimiento
Las puertas y ventanas de aluminio requieren el menor mantenimiento con diferencia en comparación con la madera y el PVC. El aluminio se puede mantener en óptimas condiciones con muy poco mantenimiento, sólo un trapo húmedo cuando sea necesario y un control regular, para asegurar que la pista se mantenga libre de gravilla para que las puertas y ventanas sigan funcionando sin problemas. Las puertas y ventanas de aluminio no se corroen, pudren o deforman y son resistentes a la decoloración por la luz del sol, no necesitan ser repintadas y mantienen su color intacto.
Las puertas de madera son las más exigentes en cuanto a mantenimiento ya que pueden parecer desgastadas por el tiempo, especialmente si están al sol durante más tiempo. La madera necesitará ser repintada cada pocos años para mantener su belleza y asegurar que las puertas y ventanas estén completamente selladas para evitar que la humedad se filtre en esta.
Las puertas y ventanas de PVC también son relativamente de bajo mantenimiento, pero sin embargo tiende a parecer desgastado más rápidamente que el aluminio, que mantiene su estética.
Eficiencia térmica
Aunque el tipo de vidrio instalado en las puertas y ventanas correderas tiene un gran impacto en la eficiencia térmica de las mismas, los marcos también juegan su papel.
Tradicionalmente, los marcos de aluminio han sido asociados con una pobre eficiencia térmica ya que el metal es un conductor natural más que un aislante. Sin embargo, desde hace algún tiempo las ventanas de aluminio tienen la famosa RPT(Rotura de puente térmico). Esta rotura separa el marco de aluminio en piezas interiores y exteriores, uniendo el marco junto con un material menos conductor que resiste la transferencia térmica de la cara exterior de las puertas al interior. Esta rotura actúa como una barrera térmica, reduciendo el flujo de energía térmica a través del aluminio.
Las puertas de madera en épocas de frío, son propensas a contraerse, lo que puede causar diminutos huecos entre los sellos y puede permitir que las corrientes de aire se introduzcan en la casa, haciendo que se sienta más frío en el interior. De todos los materiales, el PVC, generalmente tiene el nivel más bajo de eficiencia térmica, llegando sólo ligeramente detrás de la madera.
Amigable con el medio ambiente
El aluminio es infinitamente reciclable. De hecho, el 70% de todo el aluminio que se ha producido todavía está en uso hoy en día. El aluminio reciclado utiliza sólo el 5% de la energía total usada para producirlo a partir de materias primas. Esto ayuda a reducir drásticamente su impacto ambiental.